MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, viajará esta semana a Japón con el objetivo de relanzar las relaciones con la tercera economía mundial y mejorar la imagen de España en el único país donde nuestra marca no mejoró el año pasado, han informado fuentes diplomáticas.
Se trata del primer contacto de alto nivel entre el Ejecutivo de Mariano Rajoy y el nuevo Gobierno conservador japonés, salido de las elecciones de diciembre, y que se ha marcado como metas recuperar la economía nacional y reorientar su política exterior, reforzando los lazos con EEUU y dando una mayor dimensión a sus relaciones con la UE, con la que negocia un acuerdo de libre comercio.
La visita, que se desarrollará entre los días 13 y 14 de febrero, tendrá lugar en el año en que se cumple el 400 aniversario de las relaciones diplomáticas entre España y Japón, que se aprovechará para poner en marcha el Año Dual España-Japón, todo un calendario de actividades económicas y culturales con el que se pretende mejorar el conocimiento mutuo entre ambos países.
El ministro arrancará su agenda el miércoles desayunando con las principales empresas españolas presentes en Japón para conocer de primera mano su situación y sus eventuales dificultades. Las inversiones españolas en Japón apenas alcanzaron los 250 millones de euros en 2010 y se concentraron fundamentalmente en el sector de la moda.
También se entrevistará con la principal patronal nipona, Keidanren, que representa a unas 1.200 compañías y cuyo presidente, Hiromasa Yonekura, conoce bien España. Margallo tiene intención de exponer ante empresarios japoneses las reformas que el Gobierno de Mariano Rajoy ha emprendido para recuperar el crecimiento económico y crear empleo.
Tras un encuentro con representantes del periódico de mayor tirada en Japón, el Yomiuri Shimbun, el ministro se entrevistará con su colega japonés, Fumio Kishida.
El estado de la relación bilateral, la relación de Japón con la UE, los intereses comunes en América Latina, el desafío que representa el programa nuclear norcoreano y la crisis en el Sahel --hubo ciudadanos japoneses entre las víctimas del reciente ataque contra la planta de gas en Argelia--, formarán parte de la agenda del encuentro.
García-Margallo proseguirá su visita el día 14, jornada que comenzará entrevistándose con empresas japonesas con presencia en nuestro país, a las que intentará convencer de la mejora de la competitividad en nuestro país después de que en los últimos años algunas empresas niponas abandonaran sus inversiones en nuestro país, que dirigieron a otros destinos más atractivos.
España percibe en la actualidad un "renovado interés" de empresas japonesas por nuestro país, como demuestra la apuesta de Nissan por su planta de Barcelona, señalan fuentes diplomáticas.
AUMENTO DE LAS EXPORTACIONES
También se considera una "muy buena señal" el aumento del 13 por ciento que registraron las exportaciones españolas a Japón en 2012; el número de turistas japoneses que visitó España el año pasado, más de 360.000, y eso que no disponían de conexión directa desde su país, o la cooperación incipiente entre empresas españolas y japonesas en terceros países.
Es el caso de Abengoa y Sojitz en Ghana, donde construyen una desalinizadora de agua; Gestamp y Mitsui en EEUU, Brasil y Argentina; FCC y Mitsui en México, o Acciona y Mitsubishi en Australia.
El Gobierno español confía en que esta cooperación empresarial contribuya a mejorar la imagen de nuestro país en Japón, donde se nos conoce por nuestra cultura, aunque con un enfoque demasiado tradicional presidido por los clichés del flamenco y los toros, mientras que hay un profundo desconocimiento sobre otras realidades de nuestro país.
García-Margallo aprovechará su presencia en Tokio para visitar el Instituto Cervantes, donde se reunirá con los embajadores iberoamericanos acreditados en ese país.
En la tarde del día 14, le recibirá el Príncipe heredero Naruhito, a quien entregará una invitación del Príncipe de Asturias para que visite España.
Como colofón de su visita, el presidente de la patronal japonesa --a quien el Gobierno ha concedido la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil, que le impondrá García-Margallo en este viaje-- ofrecerá una cena al ministro.