Ese índice, que agrupa a treinta de las mayores empresas cotizadas de Estados Unidos, sumaba a esta hora 75,38 puntos para colocarse en las 14.496,87 unidades, con lo que trataba de reconquistar la barrera de los 14.500 puntos y cerrar la semana con balance positivo.
Mientras tanto, el selectivo S&P 500 ascendía el 0,57 % (8,74 puntos) hasta 1.554,54, y el índice compuesto del mercado Nasdaq el 0,54 % (17,54 enteros) hasta 3.240,14.
Los inversores neoyorquinos conseguían desmarcarse así de la tendencia de las bolsas europeas, que presentaron cierres mixtos con descensos en Fráncfort (-0,27 %) y Madrid (-0,26 %), pero subidas marginales en Londres (0,07 %), mientras sigue sin aprobarse un plan de rescate de Chipre.
El parqué parece más esperanzado en que la isla logrará una solución antes del lunes, y además se fijaba en unas noticias más positivas en el plano nacional, como los resultados empresariales del fabricante de ropa deportiva Nike (que se disparaba el 11,25 %) y la joyería Tiffany's (el 2,56 %).
Por otra parte, la empresa Marin Software, que ofrece una plataforma de gestión de anuncios en la web, protagonizó hoy un exitoso estreno en la bolsa de Nueva York al dispararse más del 25 % tras haber recaudado 105 millones de dólares con su oferta pública de venta de acciones (OPV).
Más de dos tercios de los componentes del Dow Jones se colocaban en terreno positivo, liderados por la tecnológica Hewlett-Packard (2,37 %) -que el jueves elevó el dividendo de sus accionistas-, el grupo industrial 3M (1,37 %), el gigante minorista Walmart (1,29 %) y la también tecnológica Intel (1,19 %).
El lado contrario de ese índice lo encabezaban las aseguradoras United Health (-1,05 %) y Travelers (-0,18 %).
Fuera de ese índice, en el mercado Nasdaq, la tecnológica Apple subía un sólido 1,52 % tras publicarse que el próximo 29 de junio presentará el iPhone 5S y el iPad 5.
En otros mercados, el petróleo de Texas subía a 92,73 dólares por barril, el oro descendía a 1.606,3 dólares la onza, el dólar bajaba frente al euro (que se cambiaba a 1,2984 dólares), y la rentabilidad de la deuda estadounidense a diez años progresaba al 1,92 %.