El ataque se produjo contra un puesto de control de la Guardia Republicana, la unidad de élite militar, situado en la carretera de la provincia de Baida que une Radah y Manasah, feudo de Al Qaeda donde el ejército desarrolla la operación, según las mismas fuentes.
"Once militares murieron y otros 17 resultaron heridos en el ataque", indicó la agencia Saba en un mensaje SMS enviado a los periodistas, citando "fuentes locales".
El ataque se produjo cuando el ejército continuaba a final del día con su operación en Manasah, lanzada durante la noche del domingo, después de que tres insurgentes se negaran a entregarse a las autoridades a pesar de las mediaciones, precisaron fuentes tribales.
Las autoridades sospechan que estos tres hombres, hermanos de Tarek Al Dahab, un jefe de Al Qaeda muerto a mediados de febrero de 2012 en un ataque del ejército, retienen en Manasah, su feudo familiar, a dos finlandeses y un austríaco secuestrados el 21 de diciembre en Saná. Los hermanos Al Dahab lo niegan.